miércoles, 4 de mayo de 2011

Entre el cielo y el mar. El atlántico a vela.


Yate: Moody Culverneer 500. DONNA

Tripulacion: 4 y el capitan.

Total de Millas: 2.500 millas (aprox. 5.000 km)


8 de Abril.—Entre el cielo y el mar ya solo queda una mirada perdida en el fino horizonte. La nada se hace cada vez más fuerte, cada vez más nada. No hemos visto un solo barco en seis días, desde que nos alejamos de las costas de Cabo Verde. Salimos aproximadamente a las 18h del dia 2 de Abril. Me pregunto que pasaría si el capitan cae por accidente al agua. Soy incapaz de navegar el Donna sin direccion alguna. Ni siquiera se usar la radio en caso de emergencia, (Nota: preguntar al capitan como funciona la radio) solo se que tengo que usar el canal 16, ya es algo.


La verdad es que me embarque en este yate a sabiendas de a que me exponia. Los que me conoceis sabeis que me mareo conduciendo, cosa no demasiado normal. Pues sí, a mí me pasa. Los primeros cuatro dias fueron horribles. Cuatro dias vomitando, en la cama y sin ni siquiera poder beber un vaso de agua. A partir del cuarto mi cuerpo se canso de gritar. Y le doy gracias, la situación empezaba a ser insostenible, desesperante. Mentalmente era ya difícil para mí estar encerrada en un barco con la compañía de cuatro desconocidos, en un espacio reducidísimo, pero si encima estas desvalida, sin casi poder moverte... Asi que amigos, si estan pensando en subir a un barco por una temporada, piensenlo dos veces primero.


Ser marinero requiere toda una serie de cualidades que hasta el momento desconozco poseer:

  1. Poder fisico. Sigo siendo una princesita aunque no lo admitire jamas en publico. (Jajaja).
  2. Capacidad de orientación. Con el sol me apano bastante bien, pero aun tengo que aprender a diferenciar algo mas que Orion y El Carro para orientarme con precision por la noche.
  3. Capacidad mental. PACIENCIA. 6 dias sin ver un barco, sin ver un trozo de tierra firme, 6 dias sin ver un puto pájaro. (A veces creo que estoy un poco loca por hacer todo esto). Ya ni siquiera se si existen otros seres humanos en este planeta o somos los ultimos 5 supervivientes. SÓLO MAR. SÓLO MAR.

Las noches son hermosas, ademas Mark ha conseguido arreglar el piloto automatico desmontando no sé qué caja negra que activaba no sé qué alarma de no sé qué luces. Asi que ahora ya no conducimos, nos sentamos a mirar como el autopilot lo hace. Mis watches consisten ahora en vigilar si vamos a chocar con algun otro barco (cosa que cuanto menos me parece poco probable porque no hay más barcos por estos mares…) y escribir este blog.


Disfruto mucho ma’s las noches ahora, dos horas pasan rapido cuando no tengo que conducir este trasto. Me parece que las estrellas brillan ma’s y ma’s fuerte. Creo que la contamincacion luminica es cosa de tierras lejanas.


10 de Abril.— Me desespero, qu’e calor. Me aburro. Me duele la barriga de estar encerrada, ya no se que pasa. Que ganas tengo de llegar y meterme en un rio de agua dulce. Tanta sal se me sube al cerebro y no puedo pensar. Cada vez que me despiertan para hacer mi match esta terrible sensaci’on de “por favor 5 minutos mas” me invade. Me parece que he vuelto a tener 10 anos y tengo que ir al colegio.


12 de Abril.— Quienes me conocen saben que la paciencia nunca ha sido mi fuerte. Y amigos, sentarse a esperar es DESESPERANTE. Ya no s’e que ma’s hacer. No quiero leer ma’s. No quiero escuchar ma’s musica. Ni hacer crochet, ni pescar, ni sentarme ni estar de pie. Ya ni siquiera dormir. Encima este calor me deja sin fuerza para nada. Qu’e pereza tengo! Me da pereza cocinar, limpiar, conducir hasta ir a cagar. El bano me parece lejos (el Donna solo tiene 14 metros de eslora…) y me canso cuando tengo que bombear el agua del retrete.


El autopilot ha funcionado intermitentemente durante los ultimos dias. Mark ha hecho un ultimo esfuerzo por repararlo pero ha sido totalmente inútil. Ha dejado de funcionar. Ahora los shifts vuelven a ser ma’s pesados. Los hemos reducido de tres horas (los augmentamos cuando funcionaba el piloto automatico) pero los ultimos 45 minutos siempre son interminables.


El boom (el metal que sostiene la vela en la parte inferior y que esta fijado perpendicularmente al mastil) sigue roto, ahora solo esta fijado al barco con una cuerda. Tambien uno de los cables de acero se ha roto. Siento que estoy en un barco de Playmobil y que en cualquier momento alguna de las dos velas va a partirse.


13 de Abril.— Me siento culpable, pero admito que no me equivocaba. Esta manana, hacia las 9:10 (GMT, diez minutos después de que acabara mi vigilancia) la vela frontal se ha partido. So’lo nos queda una vela y 376 millas para llegar a Paramaribo. La sujeción de metal de unos 10cm simplemente se ha partido en 2. Nadie se lo cree. Todo se rompe en el shift del capitan. El autopilot, el boom, la Genova (vela frontal), el cable de acero. Ah! Sin olvidar que casi no salimos de Cabo Verde porque perdimos una de las anclas a la hora de partir. Teniais que haber visto al capitan, poniendose como las balas el traje de buzo para meterse al agua a buscarla, al final la encontramos por suerte.


15 de Abril.— No hay viento, hemos arriado la vela (EN SINGULAR) y nuevamente nos sentamos a esperar a que el viento llegue. Es inútil intentar navegar ahora. La vela no para de golpear bruscamente de izquierda a derecha. —Ma’s vale parar o vamos a romper algo ma’s.—me digo.


16 de Abril.— Hoy me he despertado con el sonido de un motor, pero no era el nuestro. Es posible que tengamos un barco lo suficientemente como para que su motor me despierte?—me pregunto. Piratas—pienso. Solo estamos a 1000 millas de la costa. Me levanto medio dormida, con laganas aun en los ojos. Abro la ventana para sacar la cabeza. Un barco blanco, enorme se aleja de nosotros. Me visto en un suspiro y de un salto subo a ver que pasa. Y cual es mi sorpresa? Una olla llena de peces de un color rosa intenso, casi rojo. Tienen unas lineas horizontales de color amarillo. Qu’e bonitos!! Creo que hay como 12 o 14. Eran solo pescadores. (Creo que me han contado demasiadas historias de piratas venezolanos en los ultimos tiempos). Los chicos les han dado a cambio una de las botellas de ponche caberdiano. Que menos! Me siento muy afortunada. No pescamos pero los peces vienen a nosotros, ya sea volando como los flying fish o mediante unos pescadores de buen corazon. Me pregunto cuantas posibilidades teniamos que un pesquero se acercara a traernos pescaito fresco. QUE BIEN!


Mi shift ha empezado hace 30 minutos. Hemos colocado un toldo sobre el puente y ahora podemos conducir a los 3 de la tarde sin sentir que sudamos nuestras vidas por los poros. Aquí hace un calor infernal. Solo estamos a 6 grados del ecuador.


Uaauu! Vaya experiencia he vivido hoy! Mientras estaba haciendo mi watch un grupo de unos 30 delfines mulares han venido a visitarnos. Nadaban alrededor del barco sin esfuerzo (cosa que no me sorprende porque no hay viento, solo tenemos una vela operativa y nuestra velocidad es de 2 nudos aprox.) Que animal tan increible!! Su piel gris brilla con el sol como formando un arcoiris. Simetricos, casi creados con un espejo. Su figura perfecta redondeada atraviesa el agua sin ni siquiera quererlo. No he podido resistir la tentancion de meterme al agua. Al fin y al cabo cuantas oportunidades tenemos en la vida de banarnos con delfines en libertad? HA SIDO UN SUENO HECHO REALIDAD. Todo ha sido perfecto Velocidad minima, agua clara y delfines, muchos delfines. Grandes, pequenos y bebes! Una gran familia! Admitire que me daba miedo al principio, son salvajes!


Hemos atado una cuerda a uno de los lados del barco y otra en la parte trasera y nos sujetabamos a ella para poder nadar con los delfines! Pasaban tan cerca que si hubiera querido alagar la mano los podria haber tocado, pero creo que se hubieran asustado. Podia mirar dentro de sus ojos y sentia que ellos tambien miraban dentro de los mios...


Que dia tan perfecto! Probablemente el dia mas bonito desde que estoy en el barco. Hemos comido pescaito fresco al horno, me he banado con delfines y hemos tenido una puesta de sol perfecta. Ah!! me olvidaba... HOY HAY LUNA LLENA.


17 de Abril.— Vemos tierra!! Es todo bosque. El aire ya no huele a sal! Tiene a rio y selva! Veo pajaros en abundancia. Y el mar ha mudado su color porque la profundidad es ahora de solo 5m! Ayer por la noche, justo durante el cambio de vigilancias vimos como cambiaba de color el mar por la profundidad! Era una linea en el mar que se extendia hasta el horizonte, perfectamente definida que separaba el oceano en dos colores de verde-marron a verde oscuro.


MMM... que olor a tierra! Me pregunto como es Paramaribo. La verdad es que nunca he oido hablar de Surinam, tampoco he visto nada por television y no conozco a nadie que haya pisado esta tierra. Aunque todo esto solo hace la llegada mas excitante.




4 comentarios:

  1. GUAUUUUUUUUU.
    TENGO LA BOCA ABIERTA, INCREIBLE

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  2. Carmencita! Sigue escribiendo que estoy enganchadisima a tus historias. Que vaya todo genial. Mucha suerte. Te espero en Granada a la vuelta. Un abrazo enorme.

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  3. Carmen, quiero navegar en el Donna, a ti te gusto el viaje? me gustaria saber algo mas sobre el viaje, gracias!
    Guillermo

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